Supernatural

El fenómeno Supernatural

Dos hermanos salvan el mundo, una criatura sobrenatural tras otra. Al leer este concepto, no necesariamente viene a la mente la palabra "originalidad". Tampoco con el enfoque básico de un programa de "monstruo de la semana" al estilo de Expediente X. Y, sin embargo, Supernatural ha logrado lo que todos los productos mediáticos desean: ¡estatus de culto! Que esta serie relativamente pequeña llegue a 15 temporadas, 327 episodios e incluso un spin-off en anime, es al menos tan extraordinario como las muchas criaturas que los Winchester derrotan. Entonces, ¿cómo diablos (jeje) lo lograron Sam y Dean? ¿Y qué tiene que ver todo esto con las comedias de situación?

Cuatro puños por una bendición

Disculpa por el título, pero tomamos cualquier referencia de Bud Spencer y Terence Hill. Volviendo al tema: Que hayamos pasado 15 años recorriendo los Estados Unidos con Sam y Dean Winchester en su Chevrolet Impala, matando demonios, fantasmas y hombres lobo, e incluso encontrándonos con ángeles y Dios, no tiene nada que ver con el formato de "monstruo de la semana". Tampoco con una narrativa de alta calidad al nivel de Breaking Bad (lo sentimos). No, la razón principal o mejor dicho: las razones principales del éxito de Supernatural son Sam y Dean. ¡La mejor combinación de caracterización fantástica y reparto que jamás hayamos visto en una serie! La gran química entre Jensen Ackles y Jared Padalecki es palpable desde el primer segundo del primer episodio. El dúo es el motor bien engrasado que mantuvo a Supernatural interesante de principio a fin. Además, Sam y Dean evolucionaron con el tiempo. Y lo hicieron de una manera que uno esperaría de hermanos de verdad.

De hecho, todo esto nos recuerda casi a una comedia de situación, pero en el ámbito del horror y el misterio. Las comedias de situación suelen durar tanto tiempo porque los personajes se vuelven cercanos a los espectadores. Se convierten casi en una especie de familia. Son personas con las que uno disfruta pasar el tiempo y quiere saber qué les depara el futuro. Así, el episodio semanal se convierte en un ritual reconfortante, que funciona incluso cuando una u otra trama no es tan buena. Todo esto también lo logra Supernatural, solo que con fantasmas y demonios. Desde Buffy, la cazavampiros, ninguna serie de fantasía ha creado una relación tan profunda y personal entre los personajes y los espectadores.

Más que dos hermanos

A pesar de toda la simpatía: Sam y Dean no lograron llevar Supernatural al cielo de la cultura pop por sí solos. Nos vienen a la mente tres cosas que cimentaron el éxito de la serie. 1. El escenario: Las leyendas urbanas, los muchos monstruos de los que todos hemos oído hablar, nos dieron algo que de alguna manera entendimos y pudimos clasificar, sin quitarles a los guionistas libertad creativa. 2. La continuidad: ¿Qué otra serie logra encadenar 15 temporadas sin mayores problemas de lógica? Y eso a pesar de que los productores fueron reemplazados más de una vez. En Supernatural, cada transición a una nueva temporada se siente natural, Sam y Dean siempre se sienten como Sam y Dean (excepto quizás los últimos dos episodios, pero ese es otro tema).

Pero la mayor hazaña es para nosotros 3. el casting fenomenal: Muchas series tienen dificultades para reemplazar actores o introducir nuevas caras. En Supernatural, fueron precisamente los muchos personajes y actores nuevos los que hicieron que el programa fuera tan emocionante. Sí, conocemos las muchas discusiones sobre que podría haberse terminado después de la quinta temporada. Pero maldición, solo un año antes se había introducido a Castiel, interpretado por Misha Collins, ¡casi el tercer personaje principal! ¿Qué pasa con Crowley, interpretado por Mark Sheppard, que realmente se destacó en la sexta temporada? Charlie Bradbury, Rowena MacLeod, Jack Kline, Bobby Singer, el arcángel Gabriel, Lucifer... ¡pocas series pueden presumir de tal riqueza de personajes geniales!

No olvidar: Los fans

No importa qué llevó exactamente a la serie al éxito, sin ellos, Supernatural nunca habría durado 15 temporadas: los fans. ¡Rara vez, quizás nunca, hemos visto una comunidad de fans tan leal y apasionada! La obsesión con Sam y Dean, que hemos visto tanto en línea como en la vida real, es tan aterradora como comprensible. Su pasión se pudo ver, por ejemplo, en el 15º aniversario de The CW, cuando los espectadores pudieron elegir la mejor serie de CW de todos los tiempos. Y Supernatural superó casi con demasiada claridad a la competencia reunida como Arrow, Legends of Tomorrow o Batwoman.

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