Star Wars
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Lo que nunca quisiste saber sobre Yoda
Yoda no solo es uno de los personajes más poderosos de Star Wars, sino también uno de los más peculiares. Y no, no nos referimos a su extraña gramática ni a su humor. ¡Hablamos de sus impredecibles pies! En La amenaza fantasma y El ataque de los clones, Yoda tiene tres dedos, pero en La venganza de los Sith, El imperio contraataca y El retorno del Jedi tiene cuatro. ¡Incluso existen figuras de acción con cinco dedos! (Algunos fans suponen que su especie desarrolla un dedo adicional en la vejez para mayor estabilidad.)
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Cómo el Dykstraflex hizo famoso a Star Wars y a ILM
Empecemos con la pregunta obvia: ¿Qué demonios es un Dykstraflex? Muy sencillo: El Dykstraflex es un sistema de cámaras asistido por computadora que permite movimientos exactos que se pueden repetir infinitamente. ¿Por qué es importante? Porque George Lucas no hubiera podido realizar las épicas batallas espaciales de Star Wars sin un sistema de cámaras como este. Pero empecemos desde el principio: George Lucas quería para Star Wars: Episodio IV – Una nueva esperanza combates espaciales llenos de acción. Su intención estaba inspirada en documentales de guerra que editó mucho antes de comenzar la filmación para explicar su visión. Para lograr la dinámica deseada, no solo debían moverse las naves espaciales, sino también la cámara, lo cual era difícil de lograr con la tecnología de la época.
En sí, hacer que dos naves espaciales lucharan entre sí no era complicado, incluso a mediados de la década de 1970. Solo necesitabas dos modelos, como un X-Wing y un TIE Fighter, tal vez también la Estrella de la Muerte o un planeta de fondo, con los cuales construir tu imagen. Los elementos individuales se filmaban por separado y luego se combinaban en una sola imagen. Era crucial que las capas individuales estuvieran perfectamente alineadas. Es decir: La cámara no debía moverse ni un milímetro. O en el caso de Star Wars: Los movimientos de la cámara no debían diferir en lo más mínimo entre las distintas tomas.
El mismo problema enfrentó Stanley Kubrick en su hito de la ciencia ficción 2001: A Space Odyssey. El maestro resolvió esto con un sistema de cámaras mecánicas complejo y gigantesco que realizaba los mismos movimientos una y otra vez, los cuales luego podían ser repetidos para diferentes componentes de la imagen. Sin embargo, el proceso era igualmente laborioso y propenso a errores, además de requerir meses de trabajo manual.
John Dykstra, quien era responsable de los efectos visuales en Star Wars, tenía el avance técnico a su favor. Con su equipo, desarrolló un sistema de cámaras de control de movimiento propio, que era controlado con extrema precisión por un procesador de computadora – mucho antes de que existieran computadoras asequibles y lo suficientemente potentes. El sistema llamado Dykstraflex, en su honor, era movible en siete ejes y también controlaba el enfoque y la exposición de la cámara. Esto permitió finalmente filmar los complejos modelos de X-Wing, Millennium Falcon, Destructor Estelar y demás desde exactamente la misma posición con el mismo movimiento – tantas veces como George Lucas lo deseaba.
Gracias al sistema Dykstraflex, Star Wars se convirtió no solo en un fenómeno de la cultura pop por su historia y sus personajes, sino sobre todo por sus efectos y las batallas espaciales. Pero el sistema también fue una bendición en otro sentido: La Academia le otorgó un Oscar por los mejores efectos visuales, además, el Dykstraflex representó la capacidad innovadora de la empresa de efectos de George Lucas, ILM (Industrial Light and Magic), que luego recibió contratos de numerosos clientes.
El sistema de cámaras de control de movimiento se utilizó durante treinta años más, antes de que Lucasfilm, como todos los estudios hoy en día, pasara completamente a la tecnología digital. Aunque: De hecho, la idea sigue funcionando tan bien como antes, como Jon Favreau demostró con la serie The Mandalorian. Para su éxito en Disney+, se inspiró en muchas técnicas antiguas, incluyendo el uso de modelos detallados de naves espaciales. Luego, lógicamente, filmó con una versión moderna (y mucho más compacta) del sistema Dykstraflex.